Su música puede pronto alcanzar el punto en el que todo aquel que no esté perfectamente familiarizado con las reglas y las dificultades del arte no encuentre en él ningún placer."
Creo que hasta el propio autor de esta frase se sorprendería
al darse cuenta de cuan acertado fue su juicio, ya que describe a la perfección
la relación entre obra y público de una buena parte de la música actual. Esto
sí que es clarividencia y no lo de Rosemary Brown, sobre todo si tenemos en cuenta que se trata de un fragmento de una crítica del estreno de la tercera sinfonía de Beethoven,
escrito en 1805.